miércoles, 5 de agosto de 2009

¡Largamos!

El titulo de este blog hace referencia a una famosa frase de Hipólito Yrigoyen, de la cual tomó su nombre uno de los grupos de mayor trascendecia ideológica en este país: FORJA. La Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina trascendió su origen yrigoyenista, radical si se quiere, para convertir su ideario nacional y popular en una tremenda contribución al siguiente y más grandiso movimiento de masas que floreció en nuestra Patria: el Peronismo.
Pero no se quedó allí. Si bien desaparece como entidad con el ascenso de Perón, su discurso prosiguió penetrando, como el agua en la tierra, en las mentes de muchos argentinos; regando las raíces de la conciencia nacional, haciéndola fuerte y dándole elementos que le permitieran crecer en la mente y corazón de varias generaciones.

Y sin embargo, este blog no intenta reflotar FORJA. Ese movimiento tuvo su momento, en respuesta a su circunstancia histórica. Hoy las cosas han cambiado (aunque tristemente el trasfondo siga siendo el mismo). Han cambiado los actores, pero la comedia (o la tragedia, diría yo) sigue presentadose desde hace siglos como novedad, y todos la compramos como tal. Nuestro deber no es golpear un viejo discurso con otro, sino aprender del espíritu de esos hombres, para que la fuerza que los empujó todo el camino nos lleve a nosotros ahora hacia nuestra tan ansiada meta: la Patria Grande, la Argentina Libre (no liberal).

Como dije, han cambiado los actores. Y sin embargo, más allá de que papel le toca a quien, la obra en cartel sigue siendo la misma, y su nombre figura en grandes letras en la marquesina (aunque muchos decidan no verlo): SOMOS UNA COLONIA.

Es por ello, que al discurso colonial de siempre (ese con el que la inteligentzia ha vuelto a arremeter desde los '90) maquillado y vendido como novedad, nosotros debemos responder con un nuevo, genuino, americano y criollo discurso, inspirado en aquella declamación de Jauretche, forjista de la primera ola:

Somos una Argentina colonial
Queremos ser una Argentina libre.

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